Las olimpíadas en Brasil y el Zika

La Sociedad Brasileña de Bioética desmiente una campaña que aduce una posible epidemia de Zika

Académicos estadounidenses y de algunos otros países, encabezados por Arthur Caplan, dirigieron una carta abierta, a la Directora de la OMS pidiendo posponer las Olimpíadas en Río, en el mes de agosto próximo o bien cambiar la sede.

El argumento es que luego de las Olimpiadas centenares de miles de asistentes a los Juegos volverán /a sus países con el virus del zika a cuestas y lo difundirán entre su población.

El 31 de mayo, la Sociedad Brasileña de Bioética ha difundido una respuesta a esa carta donde deja en claro la debilidad científica del argumento epidemiológico que pretende fundamentar el pedido, aunque manifiesta su apoyo para que se tomen las medidas preventivas necesarias para informar a los participantes y público de los juegos, de la existencia de esta enfermedad.

Sandro Galea, Donald Thea y George Annas, de la escuela de Salud Pública de la Universidad de Boston, analizan la posible incidencia de la enfermedad  sobre los visitantes a las olimpíadas usando argumentos epidemiológicos incontrastables para negar la posible incidencia en la difusión de la enfermedad.

El documento publicado en el Huffington Post, concluyen que si bien los firmantes de la carta abierta tienen derecho a su opinión, no lo tienen a hacerlo en nombre de la salud pública y que las consecuencias de esta medida no sólo causarán un daño económico considerable a la economía ya frágil de Brasil, sino que también impedirán, sin razón, los  sueños de un sinnúmero de atletas de élite.

Desde América Latina, debemos preguntarnos por la ocasión de esta carta que pretende asustar y aislar a Río del resto del mundo y considerar si esto no se unirá a los ataques que ha sufrido Brasil en los últimos meses y que culminaron con el golpe  de estado a la estabilidad democrática en ese país.