Banco de Leche Humana
Banco de Leche Humana
Esta noticia nace de un trabajo que durante más de 10 años ha llevado a cabo un equipo de profesionales liderado por un miembro del capítulo argentino de la Redbioética UNESCO: Rodolfo Di Sarli. No ha sido fácil conseguir el apoyo estatal, las autorizaciones legales, su incorporación al presupuesto municipal, el instrumental, los insumos, los médicos abocados al trabajo pero finalmente esta semana han inaugurado un Banco de Leche Humana en el Hospital Z.G.A.D. Evita Pueblo de Berazategui (Pcia de Buenos Aires Argentina).
¿Qué son los Bancos de Leche Humana? Los Bancos de Leche Humana (BLH) son instituciones especializadas en las cuales se recolecta, pasteuriza y almacena leche materna para proporcionársela a los bebés que no pueden alimentarse con la que producen sus propias madres. Los mismos, son impulsados como una estrategia para salvar vidas entre los más vulnerables: los recién nacidos y, en especial, los prematuros.
Los objetivos que se persiguen con su implementación y desarrollo son:
Promover, proteger y apoyar la lactancia materna
Recoger y distribuir leche materna con calidad certificada, es decir, bacteriológicamente segura y adecuada desde el punto de vista nutricional
Sumar esfuerzos a las estrategias nacionales para la reducción de la mortalidad infantil, con especial hincapié en la disminución de la mortalidad neonatal.
¿Quiénes son los destinatarios de los BLH?
Recién nacidos prematuros y/o patológicos, cuando la madre no tiene suficiente leche o está medicada por graves problemas de salud, partos múltiples, infecciones como HIV, entre otros. Recién nacidos con enfermedad renal debido a la menor carga de solutos de la leche humana, alergias a proteínas heterólogas, etc.
La LHP Cuida el sistema inmunológico Aporta los nutrientes, calorías y proteínas necesarias para el crecimiento Previene de manera significativa la sepsis (infecciones de sangre en los prematuros) Evita la inflamación intestinal o infección (enterocolitis necrotizante) Reduce la tasa de mortalidad neonatal. Por ello podemos sostener que la leche humana es la intervención más justa y equitativa para reducir la morbimortalidad infantil.
Es sumamente importante saber quiénes pueden donar leche. Pueden hacerlo las mujeres sanas que tengan secreción láctea superior a la exigencias de su hijo/a y disposición para donar el excedente espontáneamente; no consuman medicamentos contraindicados para la lactancia, no tomen alcohol y no fumen y tengan exámenes serológicos negativos para VIH, Chagas, Hepatitis B y Sífilis.
Este banco, en un hospital público está a disposición de toda la población infantil y como todo banco de leche materna, representa representan una estrategia eficaz para promover, proteger y apoyar la lactancia materna, y reducir el número de muertes neo y perinatales.